Cuando hablamos de correos, la imagen que nos viene a la mente es la del cartero llegando a casa a entregar cartas y paquetes. Pero en el mundo hay unas 663.000 oficinas de correos, y ahora se están convirtiendo en lugares cuyo papel va más allá de la entrega de paquetes: también sirven para recogerlos. La tendencia de los envíos a NO domicilio sigue creciendo y ha revolucionado la logística y el servicio postal, que por primera vez en décadas sale de casa y se ubica en lugares concurridos y locales comerciales.
Madrid, 8 de octubre de 2024. Cada 9 de octubre se celebra el Día Mundial del Correo, una fecha que busca crear conciencia sobre el rol que tiene el sector postal en el mundo. Porque detrás de los buzones, furgonetas de reparto y carritos de los carteros hay un sector que aglutina más de 663.000 oficinas y que da empleo a cinco millones de personas. Además, los servicios postales son una cuestión estratégica en cualquier país y un eje de innovación, integración e inclusión.
En España, el sector postal gestionó más de 2.300 millones de envíos en 2023, según datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Su papel es esencial en la comunicación de las personas, y además es un testigo vivo de la historia de los países. No en vano, el actual Correos español data de 1716, aunque su historia se remonta a, al menos, dos siglos atrás.
Un sector en constante evolución
Pocos sectores hay en el mundo que hayan vivido una transformación tan profunda a lo largo de su historia. Y es que los servicios postales han pasado de ser una herramienta para la diplomacia en tiempos de guerras y conquistas, a un canal imprescindible para comunicarnos con amigos, parejas y familiares. Todo ello, utilizando los diferentes medios de transporte vigentes en cada época: de los caballos a las furgonetas, y de ahí a los envíos a NO domicilio, donde el modelo se transforma por completo para adaptarse a una sociedad con prisa que valora por encima de todo la libertad y flexibilidad.
Los servicios de correos permitieron, durante siglos, que los países creasen vías de comunicación entre ellos, acercando nuevas realidades a sus pueblos y ofreciendo un entorno que ahora nos parece natural porque vivimos en la hiperconectividad, pero que en aquella época era impensable: poder llevar mensajes de un país a otro, de una ciudad a otra, para seguir creando un acervo cultural que pervive hasta nuestros días.
La revolución fuera de casa
En las últimas décadas, y sobre todo a raíz de la popularización de las compras online, los servicios postales se han convertido en una pieza clave en el sector de la logística. Los servicios de correos ya no se limitan a correspondencia o cartas, sino que participan en la entrega de paquetes y forman parte de un sector que ha crecido con la llegada de compañías privadas de logística, como InPost.
InPost colocó su primer Locker en Polonia en 2009, antes incluso de que Amazon desembarcara en Europa para transformar para siempre la forma de comprar, cambió el modelo de entregas tradicional que empezaba a despuntar a medida que las ventas online se popularizaban con un planteamiento disruptivo: los envíos a NO domicilio. La propuesta era sencilla: en lugar de esperar al repartidor en casa, los usuarios elegirían en qué Locker recoger su pedido. Así, el usuario no tendría que estar pendiente del repartidor, ni de horarios o entregas fallidas.
A lo largo de la siguiente década, InPost experimentó un crecimiento vertiginoso, hasta llegar a nueve países, desplegar una red de más de 78.000 Punto Pack y Lockers y gestionar casi 900 millones de paquetes, como sucedió en 2023. En España, InPost cuenta hoy con más de 9.000 Punto Pack y Lockers, y ha conseguido que el 53 % de la población de 18 a 60 años residente en ciudades de más de 50.000 habitantes haya elegido alguna vez la opción de envíos a NO domicilio para recibir sus compras online.
Un viaje de ida y vuelta
InPost, a lo largo de estos años, también ha evolucionado, hasta crear una red híbrida compuesta por Punto Pack y Lockers. Los primeros son los comercios de barrio que actúan como intermediarios, recogiendo las compras online de los usuarios para que el usuario pueda pasar a recogerlas cuando quiera.
Por su parte, los Lockers son taquillas inteligentes de alta seguridad, normalmente situadas en supermercados, gasolineras, estaciones de transporte público o zonas muy transitadas y de paso, en las que el repartidor deposita los artículos adquiridos online por los usuarios. Después, cada comprador elige cuándo quiere recoger su paquete, algo que puede hacer, generalmente, durante las 24 horas del día, los 365 días del año, lo que permite una flexibilidad sin precedentes. Además, los usuarios tienen hasta 8 días para recoger el paquete, por lo que son la mejor opción cuando estamos de viaje o en periodos de mayor carga de trabajo.
La historia de InPost es también parte de la historia de los servicios postales. Una revolución y reinvención de la logística y de la forma de enviar paquetes y productos entre personas. Una tendencia que ha llegado para quedarse, y que cada vez más usuarios prueban (y repiten) por los múltiples beneficios que ofrece.
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Acerca de InPost S.A.
InPost (Amsterdam Exchange Index: INPST) es la solución tecnológica líder en Europa para entregas de comercio electrónico. Fundada por Rafał Brzoska, InPost es hoy en día una plataforma de entrega líder para el comercio electrónico, que ha revolucionado el mercado de la paquetería en Polonia.
El primer Locker apareció en Cracovia en 2009 y rápidamente se convirtió en una parte indispensable de las compras en línea, garantizando rapidez y comodidad.
En la actualidad, la red InPost es el sistema automatizado de recogida y entrega de paquetes más grande y cómodo de Europa, con más de 43.000 Lockers y más de 35.000 Punto Pack en 9 países (Reino Unido, Francia, Polonia, Italia, España, Portugal, Bélgica, Luxemburgo y Países Bajos). InPost también presta servicios de mensajería y distribución a vendedores de comercio electrónico, trabajando con unos 100.000 minoristas electrónicos.
Solo en 2023, la empresa gestionó 892 millones de paquetes.
Desde hace años, una de las prioridades de InPost es la preocupación por el medio ambiente. La estrategia de descarbonización de InPost Group es un complemento integral de su estrategia empresarial. InPost fue una de las primeras empresas del mercado polaco en sumarse a la iniciativa SBTi, que pretende alcanzar el objetivo NET-ZERO en 2040.
Contacto de prensa: 121PR – Rocío Rosón
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